IDEA DE LAS ESCUELAS MENORES:

Port-Royal sentía una particular devoción por la educación de los niños. Su intención era recoger apenas media docena de niños en una especie de seminario para conservar su inocencia y hacer de ellos unos buenos clérigos.
Adoptó el nombre de "Petites Ecoles", el que no se intentaba
competir con los colegios de la universidad, sino preparar la entrada a éstos.

La preparación se realizaba, de costumbre, en las casas paternas o en las pequeñas escuelas, propiamente dichas. Los alumnos de Port-Royal recibieron en la institución enseñanzas de nivel parejo al de los Colegios, hecho que, sin embargo, no se aireaba.
Como el número de niños aumentaba, trasladaron las Escuelas a París a finales de 1646.
Allí trabajaban cuatro maestros: Lancelot, Nicole, Guyot y Coustel. Cada uno de estos maestros estaba encargado de unos seis escolares, distribuidos en cuatro aulas. El director era Walone de Beaupuis. Las Escuelas Menores tuvieron una floreciente actividad desde 1646 hasta 1650. A partir de 1650, en que las polémicas religiosas entre jesuitas y jansenistas pasan a mayores, las Escuelas Menores han de dividirse en pequeños núcleos que se reparten por París y por las cercanías del monasterio de Port-Royal (en Granges; Chesnais y Trous). Los jesuitas persiguieron, allá donde se encontraban, la disolución de las Escuelas Menores, porque eran una bella esperanza pedagógica jansenista.
En 1656 la Escuela de Granges fue clausurada por orden real y a instancias de los jesuitas. Y en 1660 es dispersada la Escuela de Chesnais, dirigida hasta entonces por Monsieur de Beaupuis. Las Escuelas Menores recibieron un duro golpe en 1656 y, cuatro años más tarde, desaparecieron por completo para no volver a renacer.
A lo largo de 15 años de una existencia discontinua, accidentada y amenazada, las Escuelas Menores produjeron interesantes frutos pedagógicos y formaron una élite de alumnos pertenecientes a la nobleza, alta burguesía, parlamentarios y "honestos comerciantes". La innovación en los estudios tuvo un carácter experimental, y el sistema se redujo al buen sentido.